viernes, 12 de agosto de 2011

Que me gaste yo la vida devorando cada pensamiento tuyo, cada paso, que se borren tus lunares y aparezcan en reemplazo dibujados en tu cuerpo cada beso, cada abrazo. Déjame quererte tanto que te seques con mi llanto que se nuble cada cielo y que llueva hasta hacer charcos. déjame besarte tanto hasta que quedes sin aliento y abrazarte con tal fuerta que te parta hasta los huesos.

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